El 25 de octubre de 2018 se lanzó formalmente el primer Bono de Impacto Social (BIS) entre el gobierno de la ciudad de Buenos Aires y el grupo de inversores sociales, conformado por Banco Ciudad, Banco Galicia, BID FOMIN, IRSA, Organización Román; y un inversor privado asesorados por el estudio Beccar Varela, Acrux Partners, Social Finance UK y Fundación Alimentaris.

El programa de inserción laboral de jóvenes será implementado por AMIA, Fundación Forge, Fundación Pescar y Fundación Reciduca, organizaciones de la sociedad civil expertas en la temática. Además de llevar adelante el programa, compartirán aprendizajes para contribuir a una mejora continua de los resultados del proyecto.

Los Bonos de Impacto Social son contratos entre el Estado e inversores privados que buscan financiar proyectos que den solución a problemáticas que el sector público detecta en la sociedad y cuya implementación la realizan organizaciones expertas, habitualmente pertenecientes al tercer sector.

El sector privado además de ser el financiador, sumará su aporte estratégico a la gestión del programa para mejorar tanto su desempeño como los resultados. Los inversores sólo recuperarán su capital en función de los resultados alcanzados por el programa, que serán auditados de manera independiente.

Lo distintivo es que en este tipo de iniciativas, el Estado sólo paga por los resultados concretos obtenidos en la implementación de los proyectos. La herramienta surgió en el Reino Unido en 2010 con el nombre de “Social Impact Bond”, donde “bond” hace referencia al vínculo que se genera entre distintos sectores que trabajan con un mismo objetivo. En la actualidad se está utilizando para abordar problemas sociales complejos en 22 países del mundo. Ya hay más de 108 bonos en fase de implementación, lo que representa una inversión de USD 392 millones.

“La experiencia internacional demuestra que este instrumento, que alinea los esfuerzos del gobierno, el sector privado y organizaciones especializadas en la resolución de diversos problemas sociales, genera eficiencias en el uso del recurso público y en la resolución de dichas problemáticas al poner el foco en el pago por resultados. De esta manera, los programas se vuelven más ágiles e innovadores en su desempeño, y le permiten al estado recabar y construir evidencia para informar el desarrollo de futuros proyectos”, explicó María Laura Tinelli, experta en el desarrollo de instrumentos de financiación para la innovación social, Directora de la organización Acrux Partners, manager del proyecto. El primer BIS financiará la iniciativa “Proyectá tu futuro” que está enfocada en el desempleo juvenil.

En palabras de Ernesto Tocker, Director del Servicio de Empleo AMIA, el rol de la institución en el BIS  “es el de preparar a los jóvenes para desempeñarse adecuadamente en puestos de trabajo demandados por empresas”.

Para garantizar que los contenidos a desarrollar sean acordes con los perfiles requeridos por el mercado, “se articulará con las empresas para definir las habilidades y competencias necesarios para los puestos de trabajo poniendo especial énfasis en aquellas denominadas ‘blandas’, como ser el trabajo en equipo, la comunicación, la tolerancia al estrés y la frustración, entre otras aptitudes”, explicó Tocker.

Así, la propuesta busca promover que las acciones de formación incluyan prácticas en puestos concretos a fin de preparar a los participantes a desenvolverse exitosamente en el mundo laboral.

Primera experiencia en la Argentina

La Secretaría de Planeamiento Estratégico del GCBA lanzó este proyecto que tiene como fin contribuir a la inserción laboral de jóvenes en situación de vulnerabilidad de la zona sur de la Ciudad, ya que en materia de empleo son casi un 70% más vulnerables que sus pares en el resto de CABA.

Se trabajará durante 2 años para favorecer a 1.000 jóvenes de entre 17 y 24 años, enfocándose en las necesidades particulares de los participantes, incluyendo formación en habilidades técnicas y socio emocionales, orientación y apoyo para la inserción laboral, e intermediación con empresas para la contratación de los jóvenes.

El programa cuenta asimismo con un módulo de mentoreo y acompañamiento del joven una vez que comienza a trabajar. Esta primera experiencia en Argentina sienta las bases para el desarrollo de futuros Bonos enfocados en diferentes problemas sociales, brindando datos e información relevante que permitan abrir el camino para desarrollar una política pública más eficiente, que se base y aprenda de la evidencia generada.

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) financiará la evaluación de desempeño del BIS a fin de propiciar la transmisión de aprendizajes y la promoción de otras herramientas similares en la Argentina.