Un estudio israelí realizado en pacientes con esclerosis múltiple demostró que la utilización de células madre ayuda a frenar el avance de la enfermedad. Los resultados fueron prometedores y se esperan más detalles en el corto plazo.

Esta propuesta fue llevada a cabo por la compañía biofarmacéutica NeuroGenesis. En el estudio, pacientes con esclerosis múltiple recibieron células madre a través de dos métodos distintos.

Dentro de estas dos formas de administración de las células, las inyecciones dirigidas al líquido de la médula espinal arrojaron sorprendentes resultados positivos. Mientras que aquellos pacientes que recibieron una inyección intravenosa también mostraron mejoras, aunque en menor medida.

Esta terapia, que lleva el nombre de «NG-01», podría usarse también para combatir otras enfermedades neurodegenerativas. En los próximos meses se seguirá experimentando tanto en Israel, como en otros países.

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