
Con el estremecedor sonido de la sirena, comenzó, el miércoles 4 de mayo a la mañana, el Acto Central por Iom Hazikaron, que tuvo lugar en el cementerio comunitario de Tablada, y al que concurrieron dirigentes de numerosas instituciones, representantes diplomáticos, y familiares de personas que perdieron la vida defendiendo al Estado de Israel.
La conmemoración, de la que participaron alumnos de la Red Escolar Judía e integrantes de movimientos juveniles, fue convocada por AMIA, DAIA, OSA, CUJA, FACCMA, FESERA, Keren Kayemet Le Israel, Agencia Judía para Israel, la Organización Sionista Mundial (OSM), y la Embajada de Israel en la Argentina
Conducido por Ariel Cohen Imach, director del Vaad Hajinuj, y por Eitán Dujovne, como representante de la juventud, el acto en el que se recordó a los caídos en las guerras de Israel, y a quienes fueron asesinados en atentados terroristas, tuvo como principales oradores al prosecretario segundo de AMIA, Gabriel Gorenstein; la representante para el Cono Sur de América Latina de la OSM y de la Agencia Judía para Israel, Gabriela Glazman; y a la embajadora de Israel en la Argentina, Galit Ronen.
“24.068. Este es el número de caídos hoy, pero no es sólo un número”, expresó Gorenstein en su mensaje. “Son vidas que quedaron truncas y hay un dolor que no cesa, que está presente todos los días. Por eso, es muy importante que hoy estemos abrazados a las familias que perdieron a sus seres queridos y que nunca más sepamos de este dolor”, sostuvo el prosecretario segundo de AMIA.
A su turno, Gabriela Glazman se refirió al “día más solemne del calendario israelí”. “Las historias de los caídos están siempre acompañadas por una horrible sensación de pérdida, por lo que podría haber sido, y sin embargo quedó ahí. Uno que no alcanzó a ser padre, otra que no alcanzó a estudiar…. Tantas cosas no alcanzaron a decir, y a hacer. Tantos sueños se enterraron con ellos. Una vida que ya no pudieron vivir”, remarcó.
Visiblemente emocionada, la embajadora de Israel en la Argentina se refirió en el acto a la dimensión humana de lo que significa cada vida que se pierde, y valoró el sacrificio y la valentía de todas las personas que murieron en defensa del Estado de Israel. “Los familiares no necesitan un día especial. Cada día, para ellos, es así. Este día es para que nosotros recordemos quiénes eran. No solo los nombres que hemos leído aquí, si no cada uno, que es una vida íntegra que ya no será. Que su memoria sea bendita”, finalizó.
En el acto, se compartió un minuto de silencio en honor a los caídos en servicio, dentro y fuera de Israel, tanto en el campo de batalla como en diferentes circunstancias, y se encendieron antorchas y se colocaron ofrendas florales en su memoria.
Asimismo, los presentes escucharon la plegaria “El Malé Rajamim”, el recitado del Izkor y el Kadish por los caídos.
Como es tradición, en el Acto Central por Iom Hazikaron se dio lectura a los nombres de cada uno de los soldados de origen argentino que cayeron en cumplimiento de su deber, sirviendo al Estado de Israel.
Antes de finalizar el homenaje, que volvió a realizarse luego de dos años en los que debió ser interrumpido a causa de la pandemia, se compartió también el mensaje del mayor General Aviv Kochavil Comandante en Jefe de Tzáhal a los soldados, oficiales y comandantes del Ejército de Israel.